quizás porque tenía miedo a plasmar todos mis miedos y mis monstruos aquí para siempre
A día de hoy puedo decir con total firmeza que no sabía el significado de echar de menos verdaderamente a alguien
De eso que tu alma lo llame a gritos,
de ansiarle con todas tus fuerzas
De obligarte a sonreír aunque no esté contigo
Ha sido duro, no lo voy a negar, ha sido como desprenderte de una parte esencial de tu mecanismo
Como si alguien llegase sin previo aviso y te arrancase las cuerdas vocales,
te diese un paño de lagrimas y te diga
" Toma, aquí es donde vas a ahogar tu voz todo este tiempo "
Lo difícil es deshacerte de ese paño al que te has acostumbrado a ahogarte,
al que has acostumbrado a ocultar tus frágiles sonrisas
al que susurrabas te quieros a media noche mientras nadie más te oía
a agarrarlo con fuerza hasta el punto de sangrar solo por mantener un sueño,
un recuerdo vivo,
por mantenerlo cerca en la distancia
Me cuesta desprenderme de este paño de lágrimas,
me cuesta sentirme yo misma en ocasiones y me cuesta no estar con los escudos levantados
por si volvemos a separarnos estar preparada
Es echarle de menos teniéndole a escasos milímetros de mi cuerpo
de mi alma,
que comparte secretos, mimos y besos aterciopelados
que es tan suya como mía
que soy tan mía como tuya.
