Baitiare

¿Sabes qué? 
Últimamente me huele el ambiente a otra cosa. 

No sé si será el olor a cannabis sativa, que llena las casas, los parques y los rincones en que me meto día si y día también a todas horas; 

que empieza a subir la temperatura o que noto que, después de todos los fríos y jodidos meses que me he pasado deambulando sin rumbo por mi ciudad y por mi vida, algo empieza a cambiar. 

No sabría decirte si las cosas irán a peor o a mejor a partir de ahora. 

Porque, todos sabemos que incluso el más idílico ambiente puede convertirse en nuestra peor pesadilla

Pero no sé porqué, esta vez empieza a invadirme algo parecido a una "fe ciega" que hacia mucho tiempo que no experimentaba; como mínimo, no referida a mi vida personal. 
Y es que, ya viste hace tiempo como me encumbré a la hora de torturarme psicológicamente destruyendo todas mis esperanzas.
Pero bueno, que tampoco quiero dar más vueltas de las necesarias a como me metí en tal situación a mi misma. No porque me avergüence del echo de que me degradé, social, física y mentalmente, ni porque no sea un bonito tema del que hablar, sino porque el como salí de ahí, es lo que realmente incomoda a la gente. 
Y si a alguien le incomoda escuchar mi ascenso, a mi me incomoda aún más justificarlo. 

Tachan de mierda las salidas y estratagemas que usé

pero toda esa "mierda", me salvó la vida en cierto sentido. 
Muchos dirían que salí de un agujero para meterme en otro, yo les digo que salí de mi propio agujero privado para meterme en un gigantesco agujero colectivo. 
Que sí, que sigue siendo un agujero; pero a la vez que parece un túnel sin salida a todos esos que se dejan controlar por la sociedad y se dejan guiar por los estereotipos que esta marca, a los que nos metimos dentro voluntariamente, nos parece sencillamente un lugar agradable en el que estar. 
Y no digo que sean siempre buenas las vistas, que sea un lugar repleto de gente modélica o que no suceda nada deplorable.

No digo nada

No voy a defender nada, no por falta de argumentos, sino por falta de interés.
En este mundo, hay demasiadas opiniones y gustos distintos; si te dijera que una canción me parece genial tu quizás me dirías que te parece un conjunto de sonidos sin sentido.
Para gustos, los colores.
Pero voy a iluminarte y decirte algo que hará que entiendas como están las cosas. 
Si me sacaran del agujero, si me arrastraran fuera y me llevaran bien lejos, lejos de los lugares que me gustan, lejos de la gente que realmente me hace sentir bien; si me hicieran eso y no me permitieran volver, empezaría a habitar las noches encima de los capós de los coches recién estacionados solo por sentir un calor que superara la intensidad de sentir que, 

en contra de todas las predicciones has encontrado un lugar en que encajas y dónde quieres encajar.